Graziella Concetta Freni, observó durante sus experiencias profesionales con constelaciones familiares, que más del 97% de los clientes a la consulta son gemelos sobreveviente. El gemelo único desarrolla patrones de comportamiento que fueron causados ​​por eventos intrauterinos generalmente traumáticos debido a la perdida. Éstos son directamente proporcionales a su estado de madurez corporal y psíquica. 

Grabados en la memoria celular y corporal, estos actúan inconscientemente como la matriz de todas las experiencias futuras. La muerte de gemelos en el útero provoca una interrupción del movimiento hacia sus hermanos en la persona superviviente, que luego repercute en los aspectos de la vida. La búsqueda interminable de un componente de la vida, que no se puede definir concretamente, desvía cada vez más la atención del presente y poco a poco interfiere con la calidad de vida, al tiempo que aprisiona todas las energías corporales.

Es decir, este enfoque metodológico destaca cómo nuestras interacciones en la vida cotidiana surgen de matrices relacionales automatizadas derivadas de la matriz que creamos con el contacto intrauterino con nuestros gemelos, y como estas interacciones son reactivas a la supervivencia. Como consecuencia repetimos conductas que nos conllevan un gran gasto de energía.

Graziella reconoció a través de observaciones fenomenológicas que un cliente puede, a través de su memoria corporal, distinguir hasta 250 gemelos y permanecer conectado con ellos durante toda su vida.

Se trata de células madre embrionarias, que tienen un genoma único y se diferencian de otros embriones gemelos. Cada célula madre comienza su propio desarrollo y potencialmente puede madurar hasta convertirse en un organismo embrionario, un embrión, un feto o un recién nacido.
Además, en el examen de ultrasonido se puede ver que en las primeras etapas del embarazo hay varios sacos amnióticos. Estos también tienen una gran influencia en la percepción que el gemelo superviviente tiene de sí mismo y tendrán un efecto constante en su visión del mundo.

También señaló que el desarrollo del cerebro es de gran importancia. Durante los primeros 41 días se desarrolla el tronco del encéfalo. Aquí se instalan tanto el sistema de pertenencia como el de jerarquía, en el que el gemelo superviviente ocupa su lugar. Esta jerarquía tiene un efecto inconsciente en todos los sistemas posteriores.

Asimismo, cada mecanismo de supervivencia es directamente proporcional al cerebro maduro desarrollado.

Reconoció la existencia del Campo Morfogenético Gemelar, autónomo y anterior al sistema relacional familiar. Esto le permitió decodificar las matrices relacionales, repetidas en la vida cotidiana a través de la figura del Gemelo Sustituto o Gemela Sustituta, y detectar las interacciones entre las diversas bolsas de líquido amniótico presentes en el útero materno, interacciones reportadas en las áreas de vida de el sobreviviente gemelo.

Además, Graziella descubrió que los hermanos gemelos construyen su propio sistema en el útero de la madre y este es un campo morfogenético autónomo que anticipa el sistema familiar.

A través del método de trabajo desarrollado por la Dr. Graziella, el cliente integra conscientemente a sus hermanos gemelos, quienes constituyen su primer sistema de pertenencia. El movimiento de la vida se reanuda exactamente donde fue interrumpido. El cliente da un paso de la supervivencia a la vida, de la reacción a la acción: de esta manera, la energía está plenamente para su vida y despierta nuevamente la alegría de vivir.

La Dra. Freni ha ido desarrollando un conjunto de herramientas innovadoras para trabajar dentro de este Campo Morfogenético Gemelar. Desarrollando el Sistema Bastoncillos de madera, que también ha demostrado ser efectivo para su aplicación en Constelaciones Familiares clásicas, e introdujo los Velos para representar los Sacos de Líquido Amniótico.